Hay autoras que tienen algo difícil de definir, pero que me atrae de forma particular. Entre ellas está Ingrid Noll, algunos textos de Alice Munro o la escocesa Muriel Spark. Pensándolo un poco, creo que parte de su atractivo reside en la capacidad de escribir libros donde lo popular acorta distancias con la alta literatura. Además, en las tres autoras que menciono, aparece un tipo de personaje que me resulta fascinante y que es raro: el de la mujer que no es ni esposa, ni madre, ni amante, ni hija sino independiente y completamente original. Las escritoras que menciono bordan estos personajes. Hoy les recomiendo a Muriel Spark, nacida en Edimburgo, (1918-2006) que vivió en Rodesia, durante la guerra trabajó en Londres para la oficina de contraespionaje y terminó sus días en Italia. No os dejéis engañar por su sencillez aparente, cuando se comprende su escritura y su sentido profundo, crea adicción.