Así leía mis cuentos en la Fundación Caballero Bonald, en Jerez, junto a su director, Fernando Domínguez, y el escritor Antonio Reyes (antologado tamibén en el “Por favor, sea breve 2”). De los pescaítos posteriores -y del vino generoso- no tenemos imágenes.
¡Ay, Clara, pareces Felisberto en “Nadie encendía las lámparas”!…
no te creas, fue bastante más delirante… Y qué buen cuento ese, ya me gustaría leerlo como si fuera mío…